Guanajuato, Gto., a 26 de marzo de 2020.- Ante la emergencia provocada por la pandemia del COVID -19, el Pleno del Congreso local aprobó por mayoría un Punto de Acuerdo en el que se exhortó al Gobierno Federal realizar las acciones necesarias para proteger la sobrevivencia de las empresas y fuentes de empleo, a través de un ajuste fiscal y presupuestal que genere condiciones favorables para la economía, reorientando su planeación.
En su mensaje al presentar la propuesta, a nombre del Grupo Parlamentario del PAN, la diputada Lorena Alfaro García enfatizó que entre las medidas, destacan: agilizar los procesos de devolución de impuestos (IVA); suspender pagos provisionales del ISR el cual debe ajustarse al periodo de emergencia, prorrogar la presentación de la declaración anual de impuestos y valorar la opción de incrementar los porcentajes de deducción de las inversiones y la parte exenta del ISR por concepto de sueldos y salarios, así como la retribución al servicio personal subordinado.
La diputada Lorena Alfaro García refirió que el proceso de recesión económica en el país dio inicio incluso previo al diagnóstico del coronavirus, tal y como lo muestran datos del Instituto Nacional de Geografía y Estadística (INEGI), de los que se desprende una variación del Producto Interno Bruto (PIB) del -0.1% en 2019, respecto al trimestre anterior, y de -0.4% respecto a igual trimestre del año anterior.
Apuntó que para el 2020, es prácticamente un hecho que la economía mexicana profundizará su recesión, y sólo falta conocer la profundidad de la brecha: Goldman Sachs calcula la caída en 1.6%; J.P. Morgan en 1.8%; Barclays en 2%; Credit Suisse en 4% y Scotiabank en 5.77%.
“Detrás de estos números están miles de empresas y cientos de miles de empleos, de familias y de sueños, que se han construido durante años con el intenso trabajo de las mujeres y de los hombres de este país, sólo para enfrentar ahora la desgarradora perspectiva de la quiebra o del desempleo”, enfatizó.
Para concluir, consideró que las estrategias propuestas no solo serían un apoyo a las empresas, sino un auténtico salvavidas para las organizaciones y para sus trabajadores, pues las empresas se suman a la fuerza económica de la comunidad en la que funcionan.
