Guanajuato, Gto., 17 de octubre de 2019.- En el marco de la XLVII Edición del Festival Internacional Cervantino (FIC), se presentó con éxito en el Centro de Prevención y Reinserción Social (CePreReSo) de Guanajuato, la obra de teatro titulada “Alquimia y Transmutación”, influencia de Aldonza en mujeres presas dentro y fuera de una cárcel.
Durante dos días consecutivos, el área femenil del CePreReSo de Guanajuato, se convirtió en un espacio que dio paso al arte y la cultura del Festival Internacional Cervantino, en el que 40 actrices en escena, conmueven al público hasta las lágrimas, mediante una representación teatral escrita y dirigida magistralmente por Arturo Morell.
De acuerdo al propio Morell, la historia nace después de 15 años de conocer las experiencias de mujeres en reclusión y analizar la figura de Aldonza, personaje en la que El Quijote idealiza a Dulcinea.
La representación teatral inicia con una analogía en los tiempos de la inquisición y describe que para estar presa no es necesario encontrarse en una cárcel, toda vez que sin importar su origen o nivel sociocultural, muchas mujeres viven privadas de su libertad, ya sea en algún centro de reclusión o fuera, pero presas de sus temores, vicios, lastres o angustias.
La representación teatral es interpretada por actrices profesionales, en conjunto con ex internas participantes en Un Grito de Libertad y personas privadas de la libertad del área femenil del CePreReSo Guanajuato.
Alquimia y transmutación busca, en complicidad con cada una de sus actrices, recrear vivencias, traspasar paredes y explorar el proceso psicológico y espiritual que impulsa a varias mujeres a transformar lo que las daña y paraliza, confrontándose con su realidad, enfrentando los retos y reconstruyéndose a partir de la conquista de sus libertades.
Está protagonizada por la experimentada actriz de cine, teatro y televisión, Laura Luz, quien interpreta de manera espléndida el personaje de Lucía; acompañada de talentos como Valeria Morell quien representa a Irma; Sandra Martínez quien hace el papel de Selene, una guardia de seguridad penitenciaria; Alejandra Álvarez como Aurora; Víctor Ortega quien personifica a Esther y Reyna “N” una mujer privada de la libertad del CePreReSo de Guanajuato, quien encarna a Eréndira.
El elenco está integrado por 34 mujeres más, todas ellas internas del penal de Puentecillas, de las cuales siete comparten dentro de la obra de teatro, sus casos a través de pequeños monólogos.
Además de un equipo técnico y de creativos conformado por Héctor Barragán, compositor de la música original y arreglos; Lou Peralta y Alejandra Méndez, en la fotografía; e Iris López y Ricardo Nuncio, como asistentes de producción.
Por su parte, Laura Luz, expresó su congratulación por participar por segunda ocasión en la puesta en escena y dijo que es una experiencia maravillosa compartir los textos y cantos con este grupo de mujeres, porque es un trabajo de corazón con el que se busca hacer conciencia y dejar de señalar a quien se encuentran dentro de un penal.
La actriz profesional, señaló que el arte sana y la reinserción de las mujeres que pudieron actuar y aquellas que pudieron ver la obra será diferente, “el arte y la psicología debería de ser parte de la canasta básica para poder entendernos, no juzgarnos y poder crecer como seres humanos”, finalizó.
En tanto el Director del CePreReso de Guanajuato, José Luis Macías, subrayó que este tipo de actividades son parte fundamental para la reinserción social de las personas privadas de la libertad, por lo que agradeció a personal directivo del FIC que presenciaron la obra y entregó un reconocimiento al maestro Arturo Morell.
Con esta presentación, bajó el telón de un ciclo de funciones teatrales que comenzaron la semana pasada en el área varonil con la obra “Un Grito de Libertad”, que se presentó por cuarto año consecutivo en el interior del Centro y en la que participan 120 actores en escena, mujeres y hombres de la población interna.