Baga 20230518
Lo que hoy en día está sucediendo en la planta de Mazda-Salamanca, es una señal de que se está construyendo un nuevo modelo Laboral y Sindical en México, lo curioso es que tal vez Mazda-Salamanca sea un mal ejemplo de lo que debería suceder, ahí se han realizado varios procesos de consulta a los trabajadores y la participación es muy pequeña, por eso se han invalidado todos, incluso hay uno donde la CATEM, asegura haber ganado la titularidad del Contrato Colectivo de Trabajo, a pesar de ello, quién realizó el último proceso de legitimación fue la CTM, que por cierto el Centro Federal de Conciliación y Registro laboral, no ha publicado en su página como terminado el proceso, es decir no ha avalado su resultado. Mire usted en plena temporada de UTILIDADES, a los trabajadores de Mazda-Salamanca les “cago el águila” como dicen ellos cuando cobran, pero les cago de más, literal, ahora les notificaron por correo electrónico que les harán descuentos a sus salarios debido a que por error les depositaron dinero de más por concepto de utilidades y mire que ahora si les dieron donde duele y pararon la línea de producción para protestas e ir reclamarle al patrón.
La entrega de utilidades es un proceso que inicia el 10 de Abril y termina el 31 de Mayo, en él está involucrado la empresa y el Sindicato; debe haber una comisión mixta, Sindicato debió reunirse, para nombrar a la parte que representa a los trabajadores para conocer y vigilar la transparencia y claridad del reparto de utilidades, si nada de eso sucedió posiblemente sea porque en Mazda-Salamanca, los trabajadores no se han convencido de participar de los procesos gremiales que hoy les ofrece la Reforma Laboral del 2019, provocado o no, por la empresa y/o el Sindicato a la última consulta acudieron a votar menos del 30% de los trabajadores cubiertos por uno de los Contratos Colectivos de Trabajo; Tampoco asumen un proceso serio de organización, que hoy se les convirtió en un problema pues, eso los hace débiles frente al juego corporativo tanto de la CTM, como de la CATEM, además, los deja vulnerables y a disposición del patrón, porque no tienen una organización Sindical que les respalde, sino una que está del lado y a las órdenes de la empresa. Los trabajadores de Mazda-Salamanca, tienen un representante sindical legalmente registrado, que se llama Marco Antonio Aceves del Olmo, pero es “de papel”, solo recibe las cuotas, pero no defiende las causas de los trabajadores.
Considero que es momento para quienes trabajan en Mazda-Salamanca de organizarse de manera independiente, alejarse de las viejas confederaciones corporativas y corruptas; que les permita tener una organización Sindical salida de la línea de producción de la planta. Seguramente entre los que hoy alzan la voz en Mazda-Salamanca está un buen líder.
Desde la trinchera de la represión,
El Hijo del Seboruco.